- ¿Y cómo vive?
- Voy tirando. Sabía que esto iba a pasar
- ¿Sabía que iba a pasar?
- Sí. Esto o algo parecido. Siempre creí en ello
- ¿Intentó prepararse?
- No. ¿Qué se podía hacer?
- No lo sé
- La gente siempre se afanaba para el día de mañana. Yo no creía en eso. Al mañana le traía sin cuidado. Ni siquiera sabía que la gente estaba ahí
- Imagino que no
The Road. Cormack McCarthy. 2006. Pág. 126.
El siguiente boletín informativo se emite por alguno de los sistemas instantáneos de comunicación audiovisual de un núcleo urbano situado en un lugar cualquier del planeta:
La cooperación científica privada en numerosos campos como la energía nuclear, la disuación atómica, la seguridad ambiental y la física de materiales, han garantizado hacia finales del año 2111 que los mil millones de habitantes de las megaurbes del Hemisferio Norte puedan disfrutar de un aire totalmente limpio. Después de muchas décadas de investigación científica, el proyecto ingenieril ha dado como resultado un artefacto tecnológico conocido como El Ingenio. El proceso de purificación del aire que podrá generar el artefacto será de un 100%, certificando la ausencia de partículas que dañen al organismo como el dióxido de carbono, el monóxido de nitrógeno, el metano, el dióxido de azufre o el amoníaco.

Los desechos recogidos en esas membranas serán reunidos, acumulados y depositados en los denominados Sumideros de Entropía situados en las antaño naciones del Hemisferio Sur, muy esquilmadas durante décadas como para recuperarlas a corto plazo y hacer posible la vida humana con todas las garantías. La población residual que aún vive en estos reductos colaborará en el reciclaje de los desechos a cambio de un acceso libre de tasas a las cápsulas de oxígeno. El reciclaje se realizará a través del crematorio de una mezcla en proporciones equitativas del polvo de dióxido de carbono y el Uranio 235. Una composición de alta densidad es el resultado de dicho proceso que servirá de combustible al artefacto para el tratamiento del aire. Los gases de la combustión serán canalizados bajo la superficie del planeta en un proceso seguro y fiable. Una tecnología de geoingeniería a la que se ha recurrido desde hace muchos años con resultados positivos.
La financiación del proyecto corre a cargo del consorcio transnacional chino FTO (Future Technology Options), que a través de un programa secreto de investigación científica, logró patentar el sistema de purificación en el año 2011, cuando las potencias occidentales debatían superar una profunda crisis económica iniciada 4 años atrás, sin reparar ni solucionar las repercusiones ambientales que tenía un modelo de desarrollo dilapidador de recursos naturales. En la actualidad las delegaciones nacionales del Hemisferio Norte deberán satisfacer al consorcio un cánon anual por la instalación, mantenimiento y reposición del mecanismo en sus megaurbes, si quieren disfrutar de un aire apto para la vida. La transnacional espera percibir unos ingresos económicos que superan en un 200% sus previsiones más optimistas.
Foto 1: Polución en Madrid. En El País.
Foto 2: Parte del atasco kilométrico en el acceso al Parque Natural de las Cañadas del Teide. En La Opinión.
Blog muy interesante aunque de gran extensión. Nesaria la crítica en estos tiempos convulsos. Enhorabuena por el trabajo.
ResponderEliminarGracias por tu comentario y te agradezco el consejo, intentaremos ponerlo en práctica
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