martes, 28 de febrero de 2012

Claves para una visión crítica de Canarias (y 3)

   
10. Desigualdad:
El indicador AROPE es una herramienta que mide el riesgo de exclusión social y pobreza que presenta una población. El índice se construye en base a tres indicadores: el de la renta o aquel porcentaje de la población que está bajo el umbral de la pobreza, el de la privación material severa (PMS) y el de la intensidad de trabajo por hogar. Pues bien, según este índice, Canarias es la sexta comunidad autónoma de España con mayor tasa de exclusión social y pobreza para el año 2010 con el 35,30%. Una cifra preocupante que arroja un total de 647.212 personas, el 31,10% de la población canaria, por debajo del umbral de la pobreza. Una situación directamente emparentada con el alto desempleo que existe en las islas y que desgraciadamente no es nueva. Los informes de Cáritas para Canarias lo llevan denunciando durante años, indicándonos que sin grandes variaciones casi un tercio de la población canaria se encuentra bajo el umbral de la pobreza. Además, la Encuesta de Condiciones de Vida que realiza el INE presenta un panorama tan pesimista como los anteriores. Para el 2010, último dato oficial publicado, la tasa de riesgo de pobreza para Canarias se sitúa en el 31,10%, la tercera más alta de España. La encuesta indica que los hogares canarios encuentran grandes dificultades económicas respecto a otras comunidades (Pág. 4 del informe). Un panorama desolador al profundizar en la construcción de una sociedad dual; los que tienen la suerte de contar con un empleo y los que no cuentan con él y por tanto están abocados a la exclusión social y la precariedad. Una situación que amenaza con romper la débil cohesión social que actualmente existe.

11. Pleno desempleo:
Los resultados de la última Encuesta de Población Activa nos indican que la tasa de paro en Canarias alcanza el dramático porcentaje de 30,93%, una de las más altas de Europa. Ante la desproporcionada y desequilibrada reforma laboral aprobada por el gobierno del PP, que rebaja ostensiblemente el coste del despido, no hay visos de que este porcentaje mejore en el corto plazo. Ya hemos reflexionado aquí sobre las posibles razones de por qué no se crea empleo en Canarias. Lo que nos interesa resaltar brevemente, sin entrar en cuestiones metodológicas de las diferentes series que maneja el INE, es que para encontrar una tasa de paro según la EPA, en términos medios inferior al 10%, hay que retrotraerse al periodo de 1976 – 1979. En la década de los 80 se mantuvo en un 20,66%. En la década de los 90 se posicionó en un 22,50%. Una cifra que baja al 13,60% durante la primera década del siglo XXI y que vuelve a situarse en el 29,19% durante los trimestres que van desde el 2010 hasta el 2011. Un drama que es la auténtica medida del fracaso de las políticas que nuestros responsables electos han implementado en esta tierra. Ante estas cifras sobrecogedoras cualquier intento de matizar la realidad por parte de nuestros responsables políticos es de una irresponsabilidad supina. Sus a menudo, declaraciones autoindulgentes y autocomplacientes, que abundan en la idea de que en Canarias es difícil rebajar los niveles de paro por debajo de cierta cifra, es una renuncia inadmisible al cometido principal de nuestros gobernantes, trabajar para mejorar las condiciones de bienestar en las islas. Ya se sabe que presentar algo como inexorable, en este caso las precarias condiciones de trabajo y una tasa de paro inadmisible, contribuye a desmoralizar al personal, a extender la idea de que no hay opción alternativa posible, pero las hay y la clase política que (des)gobierna en Canarias tiene el imperativo de implementarlas.

Cartel contra las prospecciones petrolíferas en Canarias
12. Indolencia social:
¿Cuál es el mecanismo que debemos activar para que la gente recupere su rol de ciudadano y se movilice ante las evidentes injusticias que se perpetran con absoluto descaro casi a diario? La selección española de fútbol gana un mundial y automáticamente salen a la calle tres millones de personas. Sin embargo, se recortan derechos sociales duramente conquistados durante siglos y la respuesta social es insuficiente o inexistente en muchos casos. ¿Cómo es posible que con más de 341.000 canarios desempleados no haya una explosión ciudadana en las islas por el cambio? ¿Cómo es posible que no se haya desatado en las islas una huelga ciudadana que exija al gobierno y a los agentes económicos y sociales una lucha decidida por reducir la tasa de paro? En Canarias hay un importante sector de la población empoderada y crítica que ha jugado un papel vital en los últimos lustros. Ante atropellos económicos, sociales y/o ambientales cometidos por los poderes político-económicos ha sido capaz de activarse. Han pasado a la acción reclamando justicia, democracia y realizando una impagable labor de pedagogía social. Porque han desenmascarado los verdaderos intereses que se ocultan deliberadamente por parte de los que manejan la tramoya política y económica, además de hacer propuestas baratas y realizables. Es ese sector de la población asociado a los movimientos sociales vinculados al ecologismo y al sindicalismo, tremendamente críticos contra la construcción de infraestructuras altamente impactantes, empeñados en la defensa de los servicios públicos, el amparo de lo rural, la demanda de un urbanismo responsable, la reclamación de una ley electoral más justa, etc. Sin embargo, hay otro importante sector de la sociedad canaria que se comporta pasivamente. ¿Por qué? Una posible respuesta es que la ciudadanía es consciente de que la implicación en los procesos políticos solo se produce cuando existen procedimientos vinculantes y reales de participación política. Algo que en la actualidad no se da. Sin embargo, la participación de este sector de la sociedad en las movilizaciones es vital para que éstas alcancen mayor repercusión social y contribuyan a configurar una Sociedad Civil sólida y robusta. La ausencia de una ciudadanía comprometida con valores cívicos, que defienda sus derechos más básicos, que quiera informarse a través de medios de comunicación independientes y objetivos, que valore la cultura…. es un importante déficit que influye en el bienestar de la sociedad. Cuando la ciudadanía no es consciente de que tiene que reclamar responsabilidades a sus representantes (accountability) se produce una apropiación individual de los espacios e instituciones públicas y de ahí florecen las desigualdades, los comportamientos autoritarios, los caciquismos o la corrupción. Y de ahí la desconfianza hacia lo público y hacia todo aquello que tenga que ver con lo colectivo. Una cadena acumulativa que concluye con la apatía política del ciudadano que solo beneficia a los promotores de los atentados económicos, sociales y ambientales que han asolado Canarias de forma impune en las últimas décadas. De ahí el importante déficit democrático apuntado más arriba.

13. Diáspora:
Ante una situación tan precaria y desfavorable no es de extrañar que muchos canarios opten por abandonar las islas en busca de formación, mejores condiciones laborales y en definitiva unas condiciones de vida aceptables. Desconocemos si existe algún indicador fiable de canarios que han tenido que dejar Canarias por motivos económico-sociales, pero entendemos que es otra de las características definitorias de nuestra tierra. Quien les escribe es un ejemplo (no sabemos si bueno o malo) de salir de Canarias en busca de otros horizontes laborales pero también de regresar, para luego, de nuevo, marcharse otra vez. Las declaraciones del Sr. Melchior alentando a los canarios a salir para buscar un futuro mejor en Alemania u otros países del entorno europeo y de más allá, no solo muestra la miopía característica de políticos que eluden hacer autocrítica, muestra una completa ausencia de análisis de las condiciones económicas, sociales y educativas que promueven o motivan que los canarios tengan que optar por dejar Canarias para encontrar un futuro aceptable.

Estos son algunas de las claves que a nuestro juicio definen Canarias desde una perspectiva crítica. Hay otras muchas que sin embargo, hemos optado por no mencionar; el subvencionismo que promueve una y otra vez nuestra Administración y a la que se apuntan acríticamente agentes económicos que se definen empresarios pero que no son más que meros buscadores de rentas en provecho propio; el insularismo visto como un coste o tara frente a la oportunidad que supone interpretarlo desde un punto de vista diferencial y definitorio de una identidad y una cultura propia; la ultraperificidad mirada como la medida de la distancia que nos separa de Europa y no como la conveniencia de estar próximos a un continente gigante como es África, etc, etc. Sin duda Canarias lo tiene crudo, como dice el cartel de Ben Magec que denuncia las prospecciones petrolíferas frente a Lanzarote y Fuerteventura

martes, 21 de febrero de 2012

Claves para una visión crítica de Canarias (2)

   
6. Monocultivo productivo:
Durante la década de los 60 se produce en Canarias la última transformación en su modelo de desarrollo económico. De una economía basada en la agricultura de medianías, se migra a un modelo de desarrollo que desplaza su centro de gravedad al litoral y donde el turismo de masas se convierte en la actividad clave e impulsora de su economía. El nuevo paradigma productivo tiene un impacto brutal en el territorio y en el paisaje, cambiando por completo su fisonomía, degradándolo irreversiblemente, intensificando el consumo energético e incrementando la dependencia respecto de los combustibles fósiles. Se suceden las promociones inmobiliarias sin orden ni concierto por todo el litoral canario, en muchos casos violando la ley de costas. También las infraestructuras viarias necesarias para facilitar los accesos. Un proceso masivo que progresivamente sustituye la agricultura por el hormigón, a medida que la burbuja inmobiliaria posibilitaba rentabilizar (y agotar) los recursos, agua y suelo, de forma más ventajosa. También mayores beneficios en un plazo récord para el nuevo centro de poder, el complejo inmobiliario-construcción-banca. Como en muchas zonas del territorio nacional, lejos de parar para debatir y pensar democráticamente otros modelos productivos para las islas, se optó por huir hacia delante incluso por encima de tímidos intentos de limitar el crecimiento de más camas turísticas (moratoria turística). Se introdujo más suelo en la rueda de la acumulación capitalista aunque figuraran legalmente protegidos cambiando la ley o saltándosela descaradamente. En un territorio limitado como Canarias el resultado ha sido fatal para garantizar unos mínimos estándares de vida sostenibles. Se ha ignorado potenciar otras actividades que puedan ser una alternativa al monocultivo del turismo masivo y dentro de este el de sol y playa. Se ha desdeñado irresponsablemente potenciar el sector de las renovables con evidentes potencialidades para crear empleo de calidad y sobre el que se podría apoyar un modelo productivo sostenible para las islas. Se han desatendido las medianías donde se puede trabajar para la recuperación de los montes al tiempo que se fomenta su vinculación con un turismo rural, responsable y de calidad, etc.

7. Dependencia de la energía fósil:
Canarias podría ahorrarse cerca de 330 millones de euros al año si se invirtieran esfuerzos en crear las instalaciones eólicas y fotovoltaicas previstas en el Plan Energético de Canarias (PECAN) según la Asociación Canaria de Energías Renovables. No solo eso, también se abriría la posibilidad de crear nuevos nichos de empleo, además de colocar a la comunidad en la vanguardia mundial de un sector que será nuestro futuro si queremos perdurar cambiando nuestra forma de habitar el planeta. No parece difícil potenciar las energías limpias en Canarias con el régimen de sol y viento que disfrutamos. Una ventaja competitiva que permite producir energía limpia en Canarias de forma más barata que en otras zonas peor dotadas desde el punto de vista eólico y solar. El PECAN establece producir un 30% de la energía por medio de procedimientos limpios para 2015. En 2011 el 4% de la energía producida en Canarias procedía del viento y menos del 3% del sol. Un exiguo 7% muy alejado de la media española que está en un 18% y a años luz del objetivo previsto por el PECAN. Lo que demuestran estas cifras es que las administraciones competentes no han hecho correctamente su trabajo. La consecuencia más inmediata es que Canarias seguirá dependiendo peligrosamente del petróleo. Una dependencia con riesgos importantes para la economía, la biodiversidad y el medio ambiente. Inexplicablemente se camina por la senda de profundizar la dependencia; se apuesta por autorizar prospecciones petrolíferas en aguas Canarias, desbloquear la introducción del gas en las islas y eliminar las primas a las renovables. El lobby de la energía fósil presenta una salud envidiable y los responsables políticos que lo permiten una irresponsabilidad poco democrática.

En Gran Canaria se instalarán plantas solares en aparcamientos
8. Insostenibilidad:
Dice el Observatorio de la Sostenibilidad en España (Informe 2011. Pág. 17) que la sociedad no conseguirá solucionar grandes problemas ambientales y socioeconómicos sino es a través de políticas complejas, integradas y multidimensionales que tengan en cuenta, a la vez, las implicaciones sociales, económicas, ecológicas, culturales e institucionales. No parece que las políticas que se adoptan en Canarias responda a ninguno de estos criterios. Al contrario se han puesto en práctica políticas cuyas implicaciones en cada uno de esos ámbitos se han ignorado porque no hay una planificación a largo plazo que tengan en cuenta las diferentes dimensiones de un territorio frágil, limitado y excesivamente castigado. La existencia de un modelo productivo como el actual, altamente dependiente de los combustibles fósiles, donde la presencia de la energía limpia se obstaculiza, donde no se duda en llenar el paisaje de hormigón, donde las leyes de conservación medioambiental no se respetan, donde el transporte privado es el principal modo de desplazamiento en un territorio limitado, etc, configuran un panorama insostenible que convierte a las islas en un territorio vulnerable ante el futuro de escasez energética que está previsto. En el año 2010, expertos en urbanismo y arquitectura lo dijeron bien claro; hacen falta 10 archipiélagos como el nuestro para sostener el ritmo actual de crecimiento. Lo que significa que hacen falta 10 Canarias como las actuales para producir los recursos que generamos y para asimilar los residuos que provocamos. Respetar los procesos que son ecológicos y sostenibles es la auténtica y única alternativa real y posible para superar una crisis sistémica como la actual. El indicador de huella ecológica para el caso de Canarias es una más de las señales de agotamiento que tiene el modo de producción aplicado.

9. Ausencia de pluralidad:
¿Existe en Canarias alguna diferencia en la calidad de la información emitida por los medios de comunicación masivos, ya sean estos escritos, televisivos o radiofónicos? ¿Es posible adquirir una visión de la realidad canaria razonablemente objetiva, crítica e independiente al consultar alguno de los periódicos canarios, tipo Diario de Avisos o La Provincia, o al sintonizar alguno de los informativos que se emiten por televisión y radio? En absoluto. Lo que se recibe es una gran dosis de parcialidad hacia planteamientos conservadores, muchas alabanzas a los poderes públicos y enormes concesiones a los poderes económicos que financian a estos medios, contribuyendo a crear una ficción que favorece el adormecimiento y el engaño del espectador/lector. Una anomalía que explicaría en parte la extendida indolencia social de parte de la población canaria. Una opinión pública independiente demanda unos medios de comunicación plurales y éstos contribuyen a configurar una opinión pública informada y crítica en un círculo virtuoso que configuraría una Sociedad Civil robusta. No es el caso de Canarias. La homogeneidad ideológica de los mass media isleños es clara en muchos de los temas que afectan de primera mano la vida de la ciudadanía canaria. Se soslayan o ignoran, deliberadamente, muchas voces críticas que aportarían una visión diferente y enriquecedora de esos temas controvertidos. ¿Ha sido correcta la cobertura informativa del caso Las Teresitas? ¿Es plural el tratamiento que se da en los medios canarios a la problemática energética? ¿Gozan del mismo espacio mediático las voces conservacionistas y ambientalistas (no digo ya las ecologistas) respecto de aquellas más vinculadas al establishment canario? Una homogeneidad ideológica rota, solo en parte, en la red. La incorporación de algunas cabeceras de medios digitales, la proliferación de blogs y bitácoras particulares, o también de portales vinculados a movimientos ciudadanos, han venido a proporcionar una visión fresca, alternativa, nueva y con mayor independencia de la realidad canaria, desempeñando mejor la función de informar por cuanto son espacios sin intereses económicos o partidistas. Les mueve el derecho cívico de informar, de cuestionar y de denunciar la acción político-económica. Un comportamiento que está en el origen de aquel Periodismo (así, con mayúsculas) que existía para denunciar las injusticias y desempeñar una función social de contrapoder. ¿Existe este tipo de Periodismo en Canarias?

martes, 14 de febrero de 2012

Claves para una visión crítica de Canarias (1)


Se impone entonces una tarea fundamental a quien la sienta: hay que arriesgarse a proponer al menos un borrador de los principales temas eventualmente estructuradores de un pensamiento de la humanidad en peligro.


Frente a la autocomplaciente e interesada visión idílica que suele darse a las condiciones de vida en Canarias, muy emparentada con una estrategia turística positiva, que no se dudan en degradar cuando de lo que se trata es de solicitar ayudas públicas (mal aplicadas luego porque no se mejoran las condiciones), enfrentamos una visión crítica a través de algunos conceptos que consideramos importantes. El objeto es identificar una serie de temas clave que definan un mapa que nos ayude a tomar perspectiva de la situación social, económica y ambiental manifiestamente mejorable que existe en Canarias. Lo que sigue es una subjetiva cartografía crítica de Las Islas Afortunadas:

1. Autoritarismo y déficit democrático:
Las numerosas Iniciativas Legislativas Populares (ILP) presentadas ante el Parlamento canario son una demostración inapelable de que hay un sector de la sociedad canaria que desea participar en la vida política de las islas. Las ILP son un indicador intuitivo de la frustración política de parte del electorado canario, que se muestra insatisfecho o profundamente afectado por determinadas decisiones de sus representantes. El empeño de estos colectivos sociales de participar en la vida política de las islas, a través de los escasos y restrictivos medios que la legislación les permite, es una prueba sólida de su interés por cambiar las cosas utilizando estos medios. Lo que a su vez es una demostración cualitativa de su intención por dialogar, discutir y debatir muchas decisiones críticas. El rechazo del Parlamento canario a ciertas ILP o no permitir siquiera la discusión y trámite de muchas otras, nos muestra el verdadero carácter de un parlamento profundamente autoritario en sus decisiones y con una alta aversión a la deliberación pública razonada. No permitir la expresión política de sus propios ciudadanos, no contar con sus demandas, son muestras del enorme déficit democrático que afecta a las instituciones canarias, lo que para muchos redunda en un menor bienestar. No son casuales las altas tasas de abstención electoral presentadas en los comicios autonómicos. En las autonómicas de 2011 la abstención superó el 37% con más de 560.000 votos, primera fuerza política en Canarias.

2. Tripartidismo:
Una ley electoral de las más antidemocráticas de toda Europa, pergeñada durante los años 80 para favorecer la permanencia en el poder de sus impulsores, ha posibilitado que los tres partidos mayoritarios en Canarias, CC, PSOE y PP se hayan perpetuado alternativamente en el poder. El problema tiene que ver con la ingeniería política aplicada para concebir y diseñar una ley electoral cuyo objetivo es frenar el acceso al parlamento de grupos minoritarios que pudieran poner en peligro la hegemonía del tripartito. El resultado ha sido que formaciones políticas más pequeñas, de raigambre local o insular, tengan vetado el acceso al Parlamento y por tanto que la representatividad del mismo sea ridícula. La evidencia empírica dice que una sociedad cuyo parlamento expresa la diversidad de opiniones y posturas que la integran, resulta más igualitaria que otras donde el Parlamento se encuentra restringido a unos pocos y privilegiados partidos políticos. Un tripartidismo responsable de una situación económica y social crítica. Son ellos y no otros actores los que han tenido en sus manos los instrumentos necesarios para dirigir Canarias por la senda del desarrollo. Los principales indicadores económicos, sociales y ambientales muestran el fracaso más rotundo de sus políticas. La alternancia en la jefatura del gobierno, como socio principal del mismo o como principal responsable de ejercer oposición, les permite diluir sus responsabilidades en cada etapa o asociarse a conveniencia cuando sus posturas ideológicas son, en teoría, antagónicas.

Canarias Insurgente
3. Corrupción:
Eólico, Las Teresitas, Tindaya, Forum Filatélico, Góndola, Faycán, Unión, Jable… son los nombres de la ristra de casos de corrupción que han contaminado la vida política y económica en Canarias en los últimos 20 años. Casos de corrupción directamente vinculados con cuestiones urbanísticas, concursos para impulsar parques eólicos, tramas de presunta financiación ilegal, licencias ilegales para hoteles, despilfarro de dinero público, etc, llevan a una conclusión lapidaria, la corrupción en Canarias está institucionalizada. Únicamente en la operación Unión y Jable, la mayor trama de corrupción urbanística en las islas, con el permiso del Caso Las Teresitas, se contabilizan más de 100 imputados donde el 21% de los cargos públicos de Lanzarote han tenido que renunciar a sus responsabilidades. La corrupción forma parte del engranaje político-económico que hace mover el sistema en las islas. Un engranaje subrepticio, furtivo, que es puesto en marcha por quienes pretenden lucrarse ilegalmente contra los intereses de lo público. El hecho de que la corrupción afecte a los tres grandes partidos políticos canarios es ilustrativo del nivel de degradación existente. Y hay una cuestión fundamental que contribuye a desprestigiar la institución de la Justicia y profundiza la desafección política; en Canarias no solo se eternizan los casos de corrupción en los que se encuentran vinculados altos mandatarios políticos o figuras del poder económico, son casos que, sospechosamente, se archivan o se condenan con penas irrisorias para sus perpetradores. Lo que apuntala la idea de que en Canarias no pasa absolutamente nada cuando la corrupción florece.

4. Antiecologismo:
Un territorio privilegiado por las fuerzas creadoras de la naturaleza desde el punto de vista climático; un paisaje peculiar, de alto valor y que cuenta en su haber con cuatro parques naturales en el que uno de ellos es el más visitado de toda España; una economía altamente dependiente de la actividad turística; una de las zonas con mayor nivel de biodiversidad del mundo; la fragilidad intrínseca de un territorio fragmentado; un territorio de carácter insular donde sus costas son un elemento definitorio, vital y de importancia fundamental para la economía e identidad canaria, serían suficientes razones en cualquier parte del mundo para dar prioridad máxima a la conservación del territorio, al respeto medioambiental y a la sostenibilidad. En Canarias, en cambio, las posturas ecologistas se denigran y se estigmatizan. Canarias cuenta con un volumen significativo de legislación dirigida a la protección medioambiental que, sin embargo, no se respeta, no se cumple, o directamente no se tiene en cuenta. La proliferación de numerosos planes de desarrollo urbanístico que incumplen flagrantemente normas básicas de protección medioambiental, son una muestra inapelable de ello. Una legislación medioambiental que no ha dudado en ser modificada por decreto y de forma opaca cuando los intereses económicos se han visto amenazados (nuevo catálogo de especies protegidas, 2010). En Canarias cuando los intereses económicos puestos en juego no son significativos la legislación medioambiental se respeta razonablemente. Cuando aquéllos son importantes en cambio, no se duda lo más mínimo en incumplir las leyes medioambientales consensuadas democráticamente. Un comportamiento antidemocrático de nuestros poderes que habla por sí mismo.

5. Gigantismo:
Llamamos Gigantismo a esa política de carácter superlativo que se manifiesta en Canarias con acciones de gran repercusión mediática, elevado coste relativo, alto impacto ambiental y sobrevalorados beneficios sociales. El puerto industrial de Granadilla es un ejemplo de ello. También lo han sido las propuestas de transporte ferroviario planteadas para las islas capitalinas o el vaciamiento de la montaña de Tindaya en Fuerteventura. Pero lo que hace interesante esta práctica es que el Gigantismo no solo se manifiesta en el sector de la economía. También se hace palpable en la arquitectura y el urbanismo (PGO de Santa Cruz invasivos, Auditorios, promociones hoteleras), en la energía (plantas de gas natural, prospecciones,…) y como no podía ser de otra manera, en el sector de la Cultura. ¿O no es un mero ejercicio espectacular y desequilibrado que la iniciativa privada (o la pública) traiga a iconos de la música popular como Sting, Springsteen o Elthon John, con todas las Administraciones Públicas pregonando que es la mejor campaña de publicidad para las islas, al tiempo que la cultura popular canaria malvive en términos presupuestarios? Un Gigantismo que se aplica imperativamente, dotando a todas estas iniciativas del marchamo de un dudoso interés general y sin participación ciudadana de ningún tipo.

sábado, 4 de febrero de 2012

Obsesión reformista y dependencia energética

 
El Partido Popular ha entrado en el gobierno de España como un elefante en una cacharrería. Así invitan a pensar las reformas presentadas, mucho antes de los 100 días de rigor, en Justicia, en Sanidad, en Educación o en Economía. La excusa de que la herencia socialista es nefasta, siendo cierta, está dando mucho juego a los populares. Ante la crisis actual y la exigencia externa de realizar cambios (eje franco-alemán y mercados), surge el oportunismo del PP de imponer su proyecto de España. Lo que sorprende es la rapidez con la que el Partido Popular es capaz de realizar reformas en áreas clave de la sociedad española, en un tiempo récord, con una inmediatez de relámpago y prácticamente sin el consenso del resto de formaciones políticas. ¿No es una contradicción intentar transformar con tal urgencia áreas estratégicas de la sociedad, presuntamente claves en el desarrollo de un país?. En estas circunstancias, plantear un pacto de Estado en aquellas cuestiones que afectan a la ciudadanía de forma directa suena anacrónico. La consecuencia es que cada cuatro años tenemos una versión de España coincidente con los intereses coyunturales del partido que gobierna, pero inservible para colocar al país en una senda sólida de desarrollo económico, social y cultural.

Blog EcoOcéanos
Un desmontaje del Estado que se realiza progresivamente, muchas veces de forma opaca, obviamente con todos los papeles en regla que permite esta democracia ceremonial. El desarme está amparado por una mayoría parlamentaria que les permite implementar cualquier propuesta que consideren sin necesidad del consenso parlamentario. Ya comentamos en otra ocasión que la única oposición posible ante el monopartidismo de esta legislatura sería la que provenga de la calle. El inmenso poder asumido en las dos últimas citas electorales permite al PP desarrollar su proyecto de España con total libertad y, si así lo desea, sin el consenso de las demás formaciones políticas.

La manía reformadora también ha llegado al sector de la Energía. Recientemente el flamante ministro de Industria, Energía y Turismo, ha hecho unas declaraciones que invitan a pensar en la posibilidad de que el Gobierno Central autorice las prospecciones petrolíferas en aguas cercanas a las costas de Lanzarote y Fuerteventura. El ministro ha declarado que España no puede permitirse el lujo de eludir la posibilidad de sondear si hay o no petróleo. Estas declaraciones se suman a las dos últimas decisiones tomadas por el ministro en materia de energía y que dibujan un panorama general preocupante y especialmente crítico para Canarias; eliminación de las primas futuras a las renovables y el desbloqueo legal para la construcción de dos plantas de gas natural licuado en las islas provinciales, declarándolas, como ya es norma por esta tierra, obras singulares.

Unas declaraciones que apuntalan un modelo energético que profundiza la dependencia de los combustibles fósiles en Canarias, se obstaculiza el desarrollo de otras fuentes de energías renovables y si finalmente se autorizan las prospecciones petrolíferas, significará asumir enormes riesgos relacionados con la posibilidad de derrames masivos que pueden tener importante influencia sobre Canarias. En definitiva, más dependencia respecto de la energía fósil, menos alternativas de energía limpia y más riesgos de catástrofes.

Evolución de la extracción de petróleo y sus máximos
Es difícil que un ministro comience su mandato de forma tan clara y concisa del lado de los intereses oligopólicos de la industria de la energía fósil y en contra de los intereses de la ciudadanía. No vamos a profundizar en los riesgos que traerá para las islas la ejecución de dichas prospecciones, otros ya lo han hecho. Ni en las implicaciones que tienen dichas decisiones en el mantenimiento de un modelo productivo que genera desempleo. Lo que nos parece relevante es el modo en que nuestros responsables políticos toman decisiones. Suele ser usual imponer las decisiones, sin un consenso previo que demuestre el interés de implicar a otros actores afectados, sin un estudio solvente e independiente de los potenciales beneficios y perjuicios que pueda generar, sin la transparencia que requieren decisiones políticas de alto nivel. Este modo de actuar se parece más a recientes dictaduras, a regímenes donde la palabra Democracia solo sirve para cubrir el expediente.

¿Se puede compatibilizar una política energética convencional basada en la extracción de más petróleo, con los riesgos que ello conlleva para las costas y los ecosistemas canarios, con un modelo económico donde el turismo es el gran motivador del crecimiento económico? El Sr. Soria tiene que saber que no, sus competencias abarcan la Industria, la Energía y el Turismo. Salvo que gobierne para unos grupos de poder muy concretos.